La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo el domingo que contrajo COVID-19 y está experimentando síntomas leves.
Psaki, de 42 años, dijo que estuvo en contacto por última vez con el presidente Joe Biden el martes, cuando lo conoció en la Casa Blanca, donde estaban a dos metros de distancia y usaban máscaras. Biden, que se somete a pruebas con frecuencia, dio negativo por última vez el sábado, según la Casa Blanca.
Psaki no acompañó a Biden en su viaje a Roma este fin de semana para la cumbre del Grupo de los 20 y el próximo lunes en Glasgow, Escocia, para una cumbre climática de la ONU.
Psaki había planeado viajar con el presidente, pero canceló el viaje justo cuando estaba listo para partir hacia Europa después de enterarse de que los miembros de su familia habían dado positivo por COVID-19.
“Desde entonces, estoy en cuarentena y he dado negativo (a través de PCR) para COVID el miércoles, jueves, viernes y sábado”, dijo Psaki en un comunicado. “Sin embargo, hoy, di positivo para COVID”.
“Si bien no he tenido un contacto cercano en persona con el presidente o los miembros principales del personal de la Casa Blanca desde el miércoles, y obtuve un resultado negativo durante cuatro días después de ese último contacto”, Psaki dijo.
El personal de la Casa Blanca y otras personas que viajan con el presidente se han sometido a pruebas diarias de COVID-19 desde antes de partir de Washington y todos están completamente vacunados. Muchos funcionarios también han recibido inyecciones de refuerzo, debido al entorno cerrado y los viajes frecuentes asociados con su trabajo.
Biden recibió su refuerzo de COVID-19 el 27 de septiembre, poco después de que los reguladores federales aprobaran la tercera dosis para muchos estadounidenses.
Biden ha estado acompañado en el viaje por la subsecretaria de prensa adjunta principal, Karine Jean-Pierre. Psaki dijo que volvería a trabajar en persona al concluir una cuarentena de 10 días y luego de una prueba rápida negativa.
